“Mientras enseño continúo buscando, indagando. Enseño porque busco, porque indagué, porque indago y me indagó. Investigo para comprobar, comprobando intervengo, interviniendo educo y me educo. Investigo para conocer lo que aún no conozco y comunicar o anunciar la novedad.” Paulo Freire
Esta frase de Paulo Freire nos hace reflexionar sobre la práctica docente. El papel del docente es muy importante y conlleva una gran responsabilidad. El docente debe guiar al alumno en su desarrollo como ser humano y considerarlo como lo más importante, es un diamante en bruto que debe tallar para conseguir lo mejor de él.
De esta idea partiría el rol de docente que se asemeja a un diamantista. Para enseñar hay que conocer muy bien las metodologías, igual que el tallador conoce muy bien la técnica de tallado. El tallador con sus conocimientos de las piedras puede determinar qué tipo de talla realzará el valor de la piedra, eliminando defectos. Igualmente, el docente debe conocer bien y escuchar a su alumnado para saber que método debe aplicar, porque cada alumno es diferente y ayudarle para conseguir que aprenda de los errores. Además, cada alumno aprende a un ritmo y hay que respetarlo.
El diamantista debe ser organizado, minucioso y muy hábil, porque efectivamente las piedras que trabaja suelen ser muy pequeñas en tamaño. Es importante tener un sentido artístico bien desarrollado y ser creativo para poder elegir la forma que realza mejor el valor de la piedra bruta. Todas estas características también debe tenerlas el docente ,así conseguirá mantener al alumno motivado.
Este trabajo exige paciencia y concentración para trabajar cada una de las caras del tallado de una piedra y respetar las propiedades físicas y químicas de la misma. De la misma forma el docente desarrolla con paciencia su trabajo, observa para saber si el alumno sigue la clase y dialoga con él para conocer sus necesidades.
Al final del proceso el alumno ha cambiado, ya es un diamante tallado. En este proceso el profesor también cambia, se forma continuamente y aprende. Y adopta distintos roles según el momento de la clase que pueden ser:
“Tech Support”, este rol tiene una función principal, comprender lo que los estudiantes necesitan para aprender. Observando esas necesidades, el profesor sabe cómo debe enseñar y puede adaptarse a ellos de manera que se consiga un aprendizaje óptimo.
“The Designer” crea espacios y ambientes muy propicios para el aprendizaje. Así consigue que el alumnado preste mayor atención y muestre más interés por la materia.
“The Mentor” estimula, guía, desafía y acompaña el desarrollo del potencial de los estudiantes, se basa en la transferencia de conocimientos y en el aprendizaje a través de la experiencia, dentro de un proceso estructurado en el que se establece una relación personal y de confianza.
“Facilitator”. Su papel sería únicamente crear el ambiente en el que los alumnos aprendan de manera autónoma.
Para entender estas ideas podemos escuchar las palabras de Paulo Freire en este video.
Todos los seres humanos somos iguales y a la vez distintos los unos entre los otros, y es por eso por lo que podemos incentivar nuestro aprendizaje, podemos aprender a aprender. Y esto no sólo se aplica entre grupos sociales que están al mismo nivel evolutivo, sino que podemos aprender los unos de los otros independientemente de nuestras diferencias, aplicándose perfectamente al caso del docente. Ser docente, aunque su nombre nos guíe a pensar lo contrario, no sólo consiste en “conseguir que el alumno adquiera todo el conocimiento que se le es ofrecido”, sino que es mucho más que eso. Ser docente consta también de aprender de nuestros alumnos.
Me gustaría acabar con un refrán de nuestro refranero español, que con una simple frase nos transmite el saber popular.
”A la cama no te irás sin saber una cosa más¨
Bibliografía
Falcó, C. (2021). Rol docente.
Freire Institute. https://www.freire.org/home
¡Enhorabuena! Un ensayo con una buena argumentación del rol que propones de la que quiero destacar la visión del alumno como una joya que hay que saber tallar.
Tu cierre no tiene forma de reto pero expresa "sabiamente" uno de los aspectos esenciales de la profesión docente.
Aunque ya no lo necesitas, ganas un punto para conseguir el superpoder de "Profe con creatividad"
Me parece muy interesante la comparación que haces entre la labor de un docente y la de un diamantista, ya que los alumnos y alumnas de la ESO son sin duda diamantes en bruto, personas con un gran potencial que aun han de ser perfeccionadas o educadas. Además, creo que los roles a los que haces alusión son coherentes con esa visión de la profesión docente.
Enhorabuena por el trabajo! Me gusta mucho la perspectiva que le has dado al rol del docente. Me hubiera gustado saber como llevarías esta perspectiva a la aplicación pero estoy de acuerdo en los principios que deben guiar la práctica docente.